The beatles

The beatles

Cuéntame sobre la historia...

Alice vive en el país de las maravillas, sí, justamente en aquel donde ocurren cosas increíbles. ¿Qué fue lo entretenido de vivir en los 60's? ¿Fue el Rock & Roll, o el LSD? Esta es la pregunta que se realiza la protagonista, y que pretende hacernos conocer. Una chica Neoyorquina, algo problemática, tiene suerte, mucha suerte. Estuvo en el bar indicado, con las personas indicadas. Y esa misma noche conoce a quien no dejará de conocer jamás, un revolucionario enjaulado, Lennon. ¿El sarcasmo de Lennon y el ácido de Alice lograrán mezclarse algún día? Preguntemos a Sadie.

lunes, 12 de enero de 2015

Capítulo 39 - *¿Celos?*

39




Luego del baño de tina, que según Lennon  tenia la intención de reponerme de una noche... "Un poco diferente", Mark nos esperaba para llevarnos a ambos hasta el estudio, a mi y a John, naturalmente. 

Iba para allá esa mañana para distraerme, ahora era mi propia jefa sin Tone. Necesitaba un descanso.

Ir a la librería me atormentaba. Veía la cara de Tony en todas partes. Lo veía desnudo, expuesto al peligro como un pez en terreno de tiburones. No lograba mucho tiempo allí emocionalmente estable. Me daba por correr al sótano, apagar las luces, y botar todo lo que tenía a mi alcance... cualquiera pensaría que estoy demente, si es que ya no lo notaron antes por el aspecto de loca que suelo llevar. Luego, cuando era el turno de Rachel, tenía que inventar excusas. Casi siempre era que me tropezaba buscando cosas, y ordenábamos los libros en las cajas uno por uno sin decir ni una sola palabra.

Rachel no es tonta, y sabe perfectamente lo que me ocurre. 

Chocamos varias veces en esa época, tratando de sostenernos juntas a la partida de Tony. Luego nos dimos cuenta que no servía discutir entre nosotras y nos atamos más... pero hasta ahora las cosas están así. 

Me puse el vestido blanco, y él vistió informal, con unas sandalias y vaqueros. Conmigo, insinuaba esa rebeldía que poseía en sus genes, es como si me encarnara en sus gafas redondas, y lo invitara a ver la realidad a la que se cegaba para complacer la imagen de chico bueno, cantando canciones de amor de yerno preferido. 

Conmigo tenía al otro John, al violento, al que no necesitaba agua para ahogarse, los recuerdos le bastaban. Recuerdo un día que me conversó de un tal Stu. 

Me dijo que lo amaba, que jamás había admirado a una persona así sino a Elvis. Que ese chico tenía un aura demoníaca que solo al tocar el bajo todas las chicas morían por él. Me habló de su novia, Astrid. Me confesó que también la amaba, que todos estaban enamorados de ella; Sin embargo mientras ellos corrían como perros falderos, Stu solo caminaba con su maravillosidad y ella solo tenía ojos para él.

Me sentí completamente extraña esa mañana, después de escuchar que había amado a otra chica, algo no congeniaba. Como punto aparte, no sentí eso con Cynthia, la madre de Julian, John jamás estuvo muy enamorado de ella que digamos. 

Me miré al espejo, y una especie de culpa paranoica me golpeó. Jamás me sentí suficiente para él... de cierta forma lo veía como un Dios, o un padre, la figura ausente que me faltaba, que me sostenía cuando pedía auxilio. 

John tenía a tantas mujeres a su alcance, todas querían acostarse con un beatle, y eso me asustaba. Yo había decidido manterme como anónima, no quería sentir la presión de la gente... Aparte estaba el otro punto, no quería ser algo en la música por ser la novia de un beatle, quería que conocieran a Alice, a la fabulosa Alice. 

Me saqué la ropa, me subí a la balanza de John, y respiré profundo. 

Subí al menos dos kilos y medio. 

Quise morir al instante; Expulsar de mi cuerpo las papitas fritas, aquellas que compré ayer para almorzar, o el helado que comimos en casa, o quizás el pastel de café, o los litros y litros de cerveza. No sé porque me atormentaba tanto con mi peso, he mencionado antes que es por culpa de mi difunta madre, que sufría trastornos... pero en verdad no lo sé, nunca me sentí conforme. 

Me puse un tapado negro, para disimular los kilos demás. Claro que al parecer solo yo veía eso, porque la gente no deja de decir que estoy delgada todo el tiempo. 

Me puse un sombrero negro también, y entramos al estudio de la mano, con cuidado, para no levantar sospechas de nuestro noviazgo, cruzando la calle en el paso de cebra. 

Al cabo de un rato, me encontré con George y un amigo, lo desechó rápidamente para saludarme solamente a mi. 

-Ya, cuéntame, ¿cómo te fue anoche?

-¿Cómo sabes Harrison? y yo, señorito, soy la de las preguntas, quiero saber como te fue con Vicki- Fumaba de mi porro matutino, le convido a George una fumada. Mientras platicamos, sentados en una escalerita por la puerta trasera del Abbey Road Studio, antes de comenzar algunos ensayos. 

Tenían grandes ideas para el próximo álbum. Sería bastante diferente. Puedo jactarme de contribuir en algunas ideas del famoso Sgt. Pimienta.

Después de toser un poco, habló -Porque me llamaste, tarada, a las 6 am y dijiste ¡Con John nos tatuamos!, no sé porqué rayos te presta el teléfono drogada ese tipo. Pero bien, antes de eso necesito saber eso que querías contarme tan urgente.

No me acordaba en absoluto de la llamada, me causó gracia. Estaba loca de seguro, y con esto del amor aumentaba mi delirio. 

Luego de reírme recordé la causa de esta planeada conversación. George tenía que saber algo que me picaba, me causaba una extraña sensación. 

-Lo que tenía que contarte. Esto fue ayer, en la mañana... 


Revolvía una taza de café para el desayuno. La mañana siguiente de mi presentación, entonces se entiende que desperté mas contenta que nunca, emocionada. Encima todos nos aplaudieron y recibí la aprobación de un Beatle, ¿qué mas podíamos pedir? 

-Amelie, ¿quieres café?

-¡Estaría bien!- respondió desde el salòn.

-¡Pues levántate vieja floja!- Hablaba enserio, y me fui a mi habitación. Escuché una risa de su parte. 

En ese momento recosté mis pies sobre la cama, y tocan el timbre. Sentí que Amelie se levanta rápidamente, y abre la puerta, cerradola tras ella. 

Los pies me comían por investigar de quien se trataba, ¿por qué tanto misterio?

Asi que como una hermana menor entrometida, puse la oreja en la puerta, para escuchar algo. Nada, ningún solo ruido. Me decepcioné, debe haber bajado. 

Cuando abren, y me golpean la cabeza con la puerta, haciendome tropezar. 

El señor McCartney y Amelie me quedan viendo en el piso. Querían reír, lo sé, pero no lo hicieron. Mi cara de disgusto debió ser demasiado notoria, porque la culpabilidad no se la sacaban de los ojos. 

-Disculpa- se atrevió a decir la chica, poniéndome de pie. 

-¿Estás bien?- Emite Paul, en forma de saludo casi. 

Asentí no diciendo nada, como siempre un poco burda en modales, y me senté en el sillón con el cuerpo hundido y los pies flotando hacia arriba. 

Conversaron un rato en la cocina. Tenía algo entre los dientes, una basura en el ojo, una mosca en la sopa o como quieran llamarlo. Me paré al baño, cuando me asomo, se estaban tomando las manos. Algo le decía ella con temor, mientras el chico la tranquilizaba con su cara de niño bueno y guapo. 

Se besaron. 

Salí del baño, y di un portazo en mi pieza. 

No estuvo bien, ya sé. ¿Para qué armar pelea con Amelie si Paul no me interesaba? solo eramos amigos, pero ya.

George pestañeó varias veces después de escuchar el relato, y habló sereno -Bueno, te lo insinué el otro día, ¿ves que tenía razón?

Fumé fuerte. -¿Y no vas a hacer nada?

-No...- quedé perpleja. -Es que no hay necesidad, hace rato que Amelie no me amaba, de seguro hasta cuando estaba contigo Paul ya le había echado el ojo. 

Escupí al piso. George encarnó una ceja. -¿Tanto te molesta?

-¡No! osea, ¡Sí! ese tipo me fue infiel.

-Y tú a él, y yo a Amelie, y así es la vida bonita. No te hagas problemas, aprovecha a Paul como amigo ahora, y cuida de Amelie, que es una buena influencia para ti. 

Fruncí los labios, tenía razón. 

-Además, ya la superé...- Cambió el tono a uno pícaro. 

-Epa, ¡ya cuenta cuenta!

Estuve media hora mamandome la historia de como se conocieron esa tarde con Vicki. El chico estaba encantado. 

Brian llega a interrumpir, me saluda indiferente como siempre, con cierto... podría decir ¿asco, celos? para él era la amiga borracha, nada más. Se llevó a Harrison. 




Ese día después de visitar el estudio, me fui con mi novio a su casa... por segunda noche consecutiva. La verdad es que no quería toparme ni con Amelie, ni con Rachel. Así que mucho no me atraía a mi hogar. Chelle seguía actuando como si Tony estuviese de vacaciones y bueno... Amelie, no es necesario explicarlo. 

-¿Qué haces?- pregunté apoyándome en el piano, con los brazos entrelazados.

-¿Qué te parece que hago? me estoy rascando los pies cielo...- Responde John divertido, mientras no se despega de su trabajo. Tocaba acordes tratando de enlazarlos. 

-Mmm... a mi me parece que estás matando gatos con eso, en cualquier momento se quiebra un vidrio.

Respondí, mientras me ponía de pie, caminando por su habitación. Tenía muchas piezas de loza, y figuras extrañas de colección sobre unas repisas polvorientas. Encontré su tocadiscos -¿Podría poner música?

-¿Podrías callarte?

Me quedé seria. Así mismo me senté en un sillón de brazos cruzados. Pero John parecía no prestarme atención.

-¿Sabes? Ayer vi a Paul besando a Amelie. 

Le causó gracia y soltó una risa. -Sí sabía, ese idiota hace tiempo que está enamorado de ella. 

Se me deformó la cara. -¿Y por qué no me lo dijiste?

John frunció el ceño, y se puso los lentes. Hace poco comenzó a usarlos, solo en ocasiones. -¿Por qué tendría que importarte?

-Bueno... no sé, porque son Paul y Amelie. 

-Odio que estés celosa. Me hace sentir mal, como que yo no fuera nada.

-¿De qué estás hablando? John no digas eso joder, como voy a estar celosa...

-McCartney consigue lo que quiere. 

Siempre había una competencia entre esos dos, sin causa. En todo, envuelta en una relación de amor/odio, lo hacía mas intenso. Creo que lo mismo los mantiene unidos. 
Me quedé callada, y por un segundo recordé algo, para cambiar el tema. -¿John, por qué Syd ya sabía el nombre del álbum si aún no lo lanzan oficial? incluso había escuchado un par de temas, y usó ese termino "psicodelia" que los intelectuales emplean, tú te crees uno de esos...- Comenté inocente. La verdad a veces era bastante desinformada, que caía en la ignorancia. 

-Revolver ya está listo, hace unos buenos meses, hay gente psicópata, o desleales que roban las grabaciones del estudio y las meten dentro de casettes para comercializarlas- Dijo con aire profesional, cerrando el piano blanco, y prestándome atención al fin.  

 -Ah... que mal, igual te están robando tu trabajo, ¿o no?

-Alice, ¿quién es Syd?- Dijo brusco, sin dejarme terminar. 

Me quedé helada, me recorrió un escalofrío al oír esas palabras con gusto casi asesino. -Un amigo... amigo de nuestra banda, de las chicas...-

-¿Es él cierto? el que te besó esa vez que me echaste de tu casa. En el auto Alice...

-No...- negué como tonta, mirando a otra parte. Pero con tono de convencimiento. 

Solo se levantó del piano, y cerró las cortinas. Sacó de encima de la mesa un lindo porta cigarros, y con un encendedor caro prendió dos al mismo tiempo, me pasó uno. -Odio las mentiras...

Sus palabras quedaron volando en el vacío. 

En el resto de la noche, no dijimos ni una palabra. John se desvistió como siempre, y se escabulló bajo las sabanas blancas. Entonces, apagó la luz, y se volteó para darme privacidad. Hice lo mismo, y me metí dentro de la cama. 






HOLA HOLA ❤️💕  primer capítulo del año, algo tarde, pero aquí estoy de vuelta con esta cosa un poco rara, que me dejó sabor a relleno pero creo que sirve como puente para lo que vendrá en futuro. :3

Espero les haya gustado queridas, también espero que su comienzo de 2015 haya sido perfecto y si están de vacaciones o ya las tuvieron hayan sido muy muy gratas ❤️ Lo que es de mi parte estoy disfrutando de estas, oh sí n.n life is very short and there´s no time! 

Debo decir algo chicas, la historia ya tiene final! U_U pero a pesar de eso queda bastaaaante por ocurrir, así que espero mantenerlas enganchadas con esta cosa ❤️ UN ABRAZO GIGANTE, LAS ADORO ❤️

Pd: saluditos a la Danini que me auspicio con el pc ❤️❤️ Jajajajja

MUCHAS GRACIAS POR LEER, nos vemos en el 40... esperen... ¿CUARENTA? ok ya, es que no sé cuando avanzó tanto. UN BESO! 






3 comentarios:

  1. Holanda que talca, como andamioh ❤❤ la ameli la lleah ✌ y el pol la carni ❤ tkm que estés regular

    ResponderEliminar
  2. Como te dije antes, Cat, soy una chica con suerte. No pude leer a la primera porque me llamaron para comer, pero te digo que estuvo re bueno. No sé, los celos, hmm... Me huele raro añlslalñsañl, y más si vos decís que sirve de puente para lo próximo. HMMMM (?)

    Paul y Amelie son muy lindos, really. Pero con Sadie por ahí como que me da cosita, a mí, a la lectora. Como diría mi profesora de lengua: al lector le perturba. En este caso, a mua.

    Tony, volvé, la lectora te extraña! -No tengo una frase célebre de mi maestra para esta ocasión- Tony tenía esencia, y ahora sin él, pues :( :( :(

    Bueno Cata querida, ya quiero ver que es eso que dices que vendrá. No me canso de decirte que escribes muy bien! ♥ ¡Un beso! :*

    ResponderEliminar
  3. ¡COMADREEEEEH! Cómo que no se podía, las 02:26am y ando comentado {tuve que esperar a que se durmiera y dejara el netflix} pero en fin, ya puedo desahogarme a gusto.

    Alice y John... mejor Sadie y Lennon, sí mejor. Son la pareja más cuerda con el amor no típico que hasta empalaga... {*tos* i love you that's all i want to say *tos} ... pero sí. Cuando leí el "-¿Podrías callarte?" pensé que era el mismísimo John Lennon jajajajaja, ya sabes por el humor agrio pero de buen gusto (???) sólo tú comadre, sólo tú puedes escribirlo así.

    Jamás me cansaré de leer a ese par, y ¿CÓMO QUE YA TIENE FINAL? Me quieres matar, aún falta muchísimo más yo lo sé... y claro que me mantendrás enganchada, lo sabes RE BIEN. Ya, me hiciste sufrir... *se cae de dramática*

    Oh, siento un poco de pena por George... y por Alice también. Y envidia de Amelie por ser una suertudota. Pero debo aceptar que Paul McHorny y Amelie igual ponen intensa la situación... en pocas palabras: igual me encantan.

    En fin comadraaah, espero que estés muy muy bien.

    Y que subas pronto también, plssss.

    Cuídate mucho,
    besos♥

    PD: concuerdo con Lucy... escribes precioso.

    ResponderEliminar