The beatles

The beatles

Cuéntame sobre la historia...

Alice vive en el país de las maravillas, sí, justamente en aquel donde ocurren cosas increíbles. ¿Qué fue lo entretenido de vivir en los 60's? ¿Fue el Rock & Roll, o el LSD? Esta es la pregunta que se realiza la protagonista, y que pretende hacernos conocer. Una chica Neoyorquina, algo problemática, tiene suerte, mucha suerte. Estuvo en el bar indicado, con las personas indicadas. Y esa misma noche conoce a quien no dejará de conocer jamás, un revolucionario enjaulado, Lennon. ¿El sarcasmo de Lennon y el ácido de Alice lograrán mezclarse algún día? Preguntemos a Sadie.

miércoles, 23 de julio de 2014

Capítulo 26 - *Un nuevo amigo, jamás se rechaza"

Mis queridísimas, volví, después de un par de viajes por aquí y por allá, sana y salva, con un pedacito más de la historia, Sadie-John y todos esos. Espero les guste. LUZ, CÁMARA, ACCIÓN! 



26

Segunda parte: John Lennon






La vida sigue después de la muerte, eso es lo que dicen. También dicen que existe dios, la cura para el cáncer, y muchas cosas más, pero no sé si creerlas también. Dicen que el amor existe... y pues sí, comienzo a creer en eso. 

Luego de un mes de haber terminado con Paul McCartney, toda mi vida volvió a la normalidad, entre comillas. La vida en Londres se convertía en rutina, y ya me estaba acostumbrando a esos aires. 

Tony inició una especie de sucursal de la librería de sus padres en Londres, allí es donde comencé a trabajar por las mañanas. Rachel hacía las tardes, luego de estudiar, y Tony las cuentas. Todo era  muy tranquilo, pacifico, sin famosos, ni asuntos extraños, ni periodistas, ni fans locas embarazadas. 

Se preguntarán ¿Qué ocurrió con John? Pues yo me pregunto exactamente lo mismo. No lo vi nunca más, después de aquella vez que vino al departamento y derramó unas bolsas al suelo. Esa noche cenamos en casa, los cuatro, como una especie de buenos amigos que finjan no sentir nada, pero las miradas dicen mucho mas que eso. 

Tengo miedo, porque lo más seguro es que me haya olvidado, quizás encontró otra chica, o muchas chicas, y el resto es historia. La tonta de mi cayó otra vez. Repito en mi cabeza tantas veces, "es John Lennon, difícilmente mantendrás su atención en ti Alice, deja de soñar".

No veo televisión, pero la encendía únicamente para verlo a él. Se ve tan feliz, con su guitarra negra con blanco colgada al hombro... no puedo evitar humedecer mis ojos. Maldición. Tiene más groupies que Elvis, es tan deprimente sentirse una más. 

Estaba sentada en mi cama fumando un porro, era una de esas tardes libres en donde Rachel se ocupada de la librería, entonces tocan el timbre. Y lo tocan de nuevo, una y otra vez.

-¡Por dios! Quién es el enfermo mental tan desubicado, ¡¿Qué diablos?!- Abrí la puerta con esas palabras. -¡Harrison! -Saludé con una sonrisa gigante, y me abalancé a abrazarlo... Está bien, si extraño a los beatles, solo un poco. 

-Alice, Alice la desaparecida, ¿cómo estás? ¿Por qué ya no vienes a la oficina? Te extrañamos tanto con Amelie, tus risas, tus insultos...

-George, yo también a ustedes, se los juro. ¿Que han estado haciendo?

-¡De todo Alice! ha sido genial, fuimos a las bahamas...

Abrí ojos gigantes -¡¿Las bahamas?! ¿Qué fueron a hacer allí?

-Rodado la segunda película, está todo tan bien, mi novia es la mejor. Ella está dirigiendo la película. 

-¡Me alegro por ustedes! eso es muy bueno, podrían regalarme un poquito de esa buena suerte. 

Y así estuvimos, un buen rato. Le conté sobre mi mes, mi nueva rutina, y comimos hot dogs, muchos, George come bastante, así que preparé comida. Algo básico, porque no soy muy buena chef, pero él me ayudó con todo. 

-El sábado es el cumpleaños de Tony, pensamos celebrarlo aquí, a mi y a Chelle se nos ocurrió una fiesta sorpresa, pero aún no conocemos muchas personas en Londres, así que sería una fiesta aburrida. 

-¿y nosotros qué somos? ¿No nos invitas? 

-Pues sí, a ti y a Amelie supongo...

-Vamos, a Rachel le gusta Ringo, ¿no? Yo lo traeré, será divertido. 

-¿Cómo sabes eso?

-Tú me cuentas todo, chismosa. Paul estará feliz de verte, John también...

-Oh no no no no no Harrison, ellos no. No quiero ver a John, me avergüenza - Me miró con ojos de niño sin dulce.

-Oh vamos Alice, es solo para pasarlo bien un rato, estaremos los siete, ¿si? te traeré más de esa cosa que tienes en la mano- Miró el cigarrillo humeando y me guiñó el ojo.

Así fue como me convenció.

Llegó el cumpleaños de Tony, y yo trataba de hacer una torta semi decente. Tenía la radio a todo volumen, mientras preparábamos comidas con Rachel. 

-Probé un poco la masa y uff, estaba salada, no puedo creer como puedo ser tan tonta para confundir sal con azúcar- Dije haciendo cara de asco.

-¿Me estás jodiendo? ¡Alice! ¿Sabes qué? estás demasiado nerviosa, déjame a mi la cocina, antes que dejes un desastre. Ahora anda a arreglarte, pareces mono de feria vestida así.- Le saqué la lengua.

-¿Acaso no te viste? Termina rápido esclava, porque si no te arreglas ese cabello, Ringo Starr jamás te mirará.  

-¿Que Ringo vendrá? ¡Oh por dios eres la mejor!- Me apretó los cachetes -Ya verás que hoy será mio. 

Me vestí con un vestido negro ajustado más arriba de la rodilla, unas botas, un cabello cardado, y maquillaje negro. Está bien, quería impresionar, así que un poco de encaje no le hace mal a nadie. Supuse que a John le gustaría así.

 Miraba la hora a cada momento, para saber a que hora llegarían. Tony a las doce estaría en casa, Harry lo traería, pero los chicos una hora antes llegarían

Después de tanto caminar de mi habitación al baño, del baño a mi cocina, y así de espejo en espejo, tocan el timbre.    

-¡Señorita Murray! 

-¡Señorita Beaumont! Que gusto verla otra vez- La abracé, mientras sostenía la mano de George. -Por favor, entren. 

Alcanzé a mirar a Ringo quien estaba atrás de los chicos, y a Paul McCartney. Que desesperación. Sin embargo no estaba "él", me angustié de inmediato, tratando de ocultarlo.    

-¿Qué tal Alice?- Saludo Ringo, quien amablemente trajo una botella de whisky. 

Hasta que llegó el momento de saludar a la ultima persona. Estaba guapo, como siempre, McCartney no pierde el tiempo, y lucía una linda sonrisa, al parecer todo andaba bien. 

-Hola...- Nos saludamos de un beso en la mejilla- ¿Cómo estás?- Preguntó Paul tranquilo. 

-Muy bien, ¿Y tu?- Tratando de parecer desinteresada.

El chico solo sonrió y acarició mi espalda -Me alegro- Era obvio el dejo melancólico de sus palabras.  

Nos sentamos en los sofás, y comenzamos a comer y a beber, felices de la vida. El ambiente estaba tranquilo hasta el momento, no habían tensiones, incluso entre mi y Paul. Rachel sonreía a Ringo como loca, pero al parecer este no captaba demasiado.    

-¡Es una locura!- Expresó Rich sonoramente -Shhh, escuché algo- Unos pasos a lo lejos. 

Todos nos exaltamos al escuchar el timbre. Rachel corrió a apagar las luces. Todos nos pusimos de pie y el típico -¡Sorpresa!- Gritamos al abrir la puerta. 

Pero desgraciadamente, la sorpresa era para mi. 

-¿Me gané un premio?- Una fugaz mirada entre ambos.

-¡Arruinas todo siempre Lennon!- Dijo Ringo mientras entraba al departamento un John... borracho. 

-Cállate nariz de zapallo. ¿Donde está el cumpleañero? Le traje un regalito especial- Le guiño un ojo a Ringo.

-Aún no llega. -Respondió Rachel seca. Jamás le cayó bien, "después de".

-Hola bonita, ¿así me saludas?- Inquirió mirándola, esta lo ignoró por completo. 

-Pero que noviecito te gastas- Susurró la chica en mi oído. 

Saludó de forma general a todos, y se sentó a mi lado, sin mirarme aún si quiera de reojo, y prendiendo un cigarrillo. 

-Deja de seducirme Sadie, eres la chica más hermosa de aquí.    

Me encontré en una disyuntiva. O actuaba como todas las chicas, como en realidad me sentía, derretida por dentro, con cara de babosa... o me hacía la interesante, porque al parecer Lennon funciona mejor de esa forma.


 Así que sí, definitivamente sí.


-¿Seducirte? en tus sueños lúcidos. Y que soy hermosa, es bien sabido por todos.

Entonces soltó una risa inaudible, y me sentí aliviada, al menos no estaba molesto por algo. 

Pero el enojo, ahora me pertenecía a mi, por su notable olvido ¿qué ocurrió para que cambiara tanto de la noche a la mañana? si hace unos días dijo que quería cuidarme, y no se cuanto palabreo más. Un mes, yo no podía ser olvidada un mes... "a verdad, es John Lennon, a veces se me olvida". Su boca emanaba olor a alcohol, que sin embargo, me gustaba bastante. 

John y Paul reían de lo mismos con sus bromas y códigos que nadie entiende. Pensé "seguro que después de mi todo anduvo mejor entre ellos" y tiene sentido, la repentina indiferencia de John.  

Me sentí incomoda, entre ellos dos, naturalmente. 

Pero entonces dije, ¿Qué carajo? Soy Alice, a mi nadie me intimida, menos en mi propio habitad. 


Así que me levanté del asiento, con mi mejor sonrisa, y subí el volumen de la música. Tomé la mano de Amelie, a quien separé de George por un minuto, y comencé a bailar y hacer el ridículo, como suelo hacer. 


Lennon y McCartney se peleaban el premio al más desviado observando mi show, con cara de fascinación. "Señoras y señores, al que gane el juego, prometo un buen premio".

Pasó el rato, todos seguíamos bebiendo y riendo. Tony llegó y todo el mundo lo abrazó, deseándole mucho amor y paz en su cumpleaños número veintitrés. Ya eran las 2:00 am, y todos bebieron un poco más de la cuenta. Dicen que las verdades salen a flote.

-¿Por qué miras tanto a Ringo?- Preguntó Harry, mientras Tony tenía fija la vista en Rachel con su compañero.


-¿Qué no puedo mirar?- Se sintió intimidado, y descubierto, se puede percibir en su tono de voz.


-Bueno, obvio que sí, pero parece que te lo tragarás con la mirada. 


-Bueno... quizás es porque es un beatle, ¿tiene sentido no?


-Cielos, me encantan los beatles, todos ellos, estoy notablemente feliz aquí, pero no por eso hago lo que estás haciendo. 


-Harry, ya deja de hablar tonterías, no estoy haciendo nada, solo lo normal. Cualquiera estaría feliz de estar aquí.

Amelie besaba George una y otra vez, Rachel hablaba con Ringo, mientras Tony y Harry miraban esa escena, y yo al medio, de los chicos, sin saber que rayos hacer, otra vez, porque mi compañera de baile me abandonó.

-Que ojasos tienes, debía decirlo- Inqurió Rachel, Ringo rió incomodo. 

-Gracias, los tuyos también son lindos, son azules, ¿no?- Respondió el chico algo tímido.

Rachel parpadeó muy rápido. -Azul profundo. ¿Tienes novia?- Dijo sin anestesia. Como lo hacemos en Nueva York.

-Nada serio.

-No busco nada serio tampoco- Guiño un ojo la rubia, y bebió de su vaso.

-Eso es jaja, es interesante- Inquirió sorprendido el chico. -¿Entonces? Nada más que decir, ¿verdad? ya estamos listos.

La chica entendió el mensaje y soltó una risa. -Bueno, si me lo pones así, sería un gusto. 

Harry se levantó molesto desde el otro lado de la sala. -Me voy, gracias Chellle, nos vemos Alice.

Nos miramos con Rachel de lado a lado, y hicimos un gesto de "¿Qué ocurrió?" Luego reímos, y seguimos en lo nuestro.

-¡Tony, ven aquí!- Lo invitó John. Mi amigo había quedado solo.

John masticaba un trozo de muffin supuestamente de chocolate. Era un muffin de marihuana. 

-Te estás comiendo mis cosas... esos no eran de uso público ¿Quién te lo dio?- 

-Ojala eso fuese así...- Rodé los ojos -Tony. Está rico, ¿lo hiciste tú? 

-Sí- Robé un trozó de su mano, ofreciéndole a Paul, quien le dio una mascada. 

-Mira Alice, quien diría que tienes cualidades para cocinar- Exclamó Paul, saboreando emocionado. 


-Escondidas, bien adentro. Soy un baúl de sorpresas- Inquirí sonriente, guiñando un ojo a Lennon. Hizo una mueca con la cara, que me demostró que caía muy bien en esa personalidad mía. 

-Je t'aime- Dijo George en el oido de su novia. 

-Harrison, ya no tienes para que hacer eso. ¿Recuerdas cuando nos conocimos?- Rió Amelie -Empezaste a hablar en francés, solo para impresionarme.


-¿Lo ves? y aquí te tengo junto a mí- Respondió George -Espero no me dejes por otro Amelie, porque juro que lo mato- Comenzó riendo, pero luego tornó su expresión a una seria, cayó mientras pensaba en algo, Amelie se sobresaltó -Aveces me da lastima por Paul y John, jamás pelearía con un amigo por una chica, aunque fuese la reina Isabel.


Amelie miró a Paul, con un sentimiento extraño dentro de sí, como si algo no calzara realmente. Sonrió a penas. -Sí, me imagino. Pero Paul ya no está enamorado ni mucho menos...


-¿Y tú como lo sabes tan bien? Lo está cariño, él me lo confesó hace unas semanas... pero ya conoces a Paul, siempre cambia de intereses. 


-Si, bueno... supongo que sí- La chica seguía con un gusto agrio entre los labios. 



Ya eran las 4 am, y nadie sabía nada de nadie. El alcohol y los porros se le subieron a todos. A Amelie y George no los vimos más. Tony conversaba con Ringo, más bien, al fin lo conocía, Rachel dormía en el sillón, con la cabeza en las piernas de este último, y yo reía con ambos chicos, John y Paul, extrañamente. 

-Sabemos bien quien bebió más esa... hip... esa noche en tu casa ¿se acuerdan? Fuiste tú McCartney- Dijo John con dificultad.

-Mejor no recordar eso, que vergüenza, pero ahora me pondré a vomitar justo aquí, así que mejor voy al baño, con permiso.- Respondió Macca. Se levantó tambaleándose en todas direcciones.  

-Debe ser broma, necesito ver eso, el señor correcto McCartney- Reí.

-Oh sí, adelante- John se levantó y caminó por el pasillo, pero en ves de ir a ver a Macca, dobló en mi habitación, sin saber que esta lo era realmente. Lo seguí simplemente, no sé si porque quería estar a su lado, o más bien para que no dejara algún desastre. 

Entonces se volteó bruscamente, y cerró la puerta tras nosotros -Sadie... 

-¿Qué te pasa? Abre la puerta... 

-¿Te da miedo?- Acercó sus manos a mi cintura. Por ende todo su rostro. El olor a alcohol emanaba de su boca. 

Entonces me sentí pequeña otra vez. Recordé aquella vez que me sentí tan humillada en su habitación, llorando en su baño a las cuatro am. 

-Estás mal John... no soy este tipo de mujer, si es lo que piensas.

-Alice, déjate llevar. ¿Cuánto esperaste por esto? estamos borrachos otra vez, mañana no te acordarás, sabes que lo deseas. 


Lo pensé un poco. Esa forma que tiene de decir las cosas, me puede algunas veces.


-No quiero que ocurra algo entre tú y yo así, no de esta forma.

-Vamos Alice, esto es solo un juego, somos un juego, somos amigos. Deja de joder...-Beso mi cuello a la fuerza.

-No- lo empujé lejos -no es solo un juego, hace un mes que no te he visto y ¿haces esto?, antes de eso podría jurar que no lo era para ti tampoco. Conmigo no se juega, idiota. 

Abrí la puerta rápido y se quedó solo en mi habitación, con la puerta cerrada. Estaba tan enojada, con él y conmigo, por hacerme falsas ilusiones, y pensar que él sentiría lo mismo que yo. Era una más, él mismo lo acaba de corroborar. Y mi mayor miedo, se cumplió.

Sentí asquerosas ganas de llorar otra vez, pero no. Soy más fuerte que un galanaso de rock & roll.




Entonces fui a revisar a Paul, para ver como se encontraba, y para mi no-sorpresa estaba apoyado en el lavabo. 

-¿Mejor?- Acaricié su espalda. 

-Sí, no fue necesario, con un poco de agua estoy mejor- Sonrió. 

Estuvimos sentados en el suelo un rato, mientras yo acariciaba su cabello, entre el efecto del trago. -No me gusta verte así. -Dije de repente. 

-Que linda, no te preocupes. 

Nos miramos fijamente a los ojos, tal como cuando estábamos en Paris, en un balcón de un club, y nos besamos por primera vez como un juego, o una apuesta. También recordé aquella vez que lo conocí, en Nueva York mientras cantaba I Saw Her Standing There, y me acompañó en uno de los trips más horrendos. Cuando pasamos la noche juntos, y luego pidió que fuese su novia, pero yo me rehusé... cuando me lo pidió luego de estar junto a John tan feliz, y yo le dije que sí sería su novia, sabiendo que Lennon se enteraría, que tonta fui. 

Recordé cuando supe que sería padre, y me bajé de ese loco sueño en el que vivía, y me di cuenta que no eramos nada, solo simples amigos que aún no lograban conocerse bastantemente bien, y que incluso esa Anna, tenía más derechos que yo.  


 Entonces se acercó a mi y depositó un beso tímido en mis labios. Me molesté y retrocedí mi cabeza, pero entonces recordé toda la rabia que sentía con John, esos obstaculos que se anteponían, así que hice algo despechado. Tomé su mejilla, y esta vez fui yo quien lo besó. 

Los labios de Paul son perfectos, son suaves y tienen la textura perfecta. Estuvimos así un buen rato, disfrutando de los labios del otro. Extrañaba sus besos, pero no lo amo, no simplemente. 

-Eso fue tan inesperadamente...-

-Estupendo- Concluí, ambos sonreíamos, con esa chispa traviesa.

Nos quedamos en silencio. 

-Fue todo tan rápido, tan raro, que no alcancé a disfrutarlo. 

-Digo lo mismo. Quizás no nos conocimos bien... digo, todo se dio, pero no fue de una forma común. 

-Sí, es decir, tener relaciones es algo pero... ya sabes, eso de hacer el amor... es mas profundo.

Me sonrojé. -Sí, pero bueno, quizás eso era todo lo que tuvimos, ¿no? nos faltó para tener "ese amor".

-bueno...- respondió Paul sonrojado - sí es cierto... pero digamos que fue la relación fugaz mas entretenida que tuve. 

-Jaja, sí, sin duda fue entretenido. Fue lindo lo que tuvimos Paul. Radical.

-Fue sexy, sin duda...-

-Sí, si...- Concluí sonriendo.

-No quiero dejar de verte linda. ¿Vivirás aquí un tiempo más? supe que se asentaron en Londres- Asentí -¿Qué harás ahora? ¿seguirás con la carrera del arte?- Sonreí, la verdad no tenía nada en planes en mi maldita vida.

-Estaré aquí cada vez que me necesites- Respondí sincera.

-Es bueno saberlo, también estaré aquí, o bueno, más bien, ya sabes, busca a Amelie y me encontrarás. 

-Lo tomaré en cuenta- Me abrazó por los hombros y dejé caer la cabeza -Gracias por raptarme.

-¿Lo hice bien no? casi no se notó, pero lo hice. El tema es que te gustó.

-Tú me gustaste. Eres el mejor, gracias por todo lo que has hecho, Londres no estaba en mis planes en absoluto. 

-Nos llevamos bien eh. ¿Te confieso algo? pero sin remordimientos...- Asentí -Aún pretendo que seas mía, aunque sea por última vez.

-¡McCartney!

-Lo prometo. Lo serás... como novios no servimos, está claro. Tú no eres una esposa como me gustaría tener... no sabes ni hacer huevos- Reí, está en lo cierto -Pero serás mía Alice, lo serás. Me siento bien ahora, siento que gané una compañera, una amiga, pero no amiga.

-Ven aquí Macca...- Lo abracé -Amigos, digamos que amigos con beneficios, pero si alguno se empareja, al carajo los beneficios- 

-No lo pudiste decir mejor- pero este sonrió con esa picardía que saca casi nunca y me besó profundamente. 

-Me encanta nuestra relación ahora. Más liberal, así debió empezar todo -Reí después del beso. 

-A mi también, vieran como. 

John estaba en el marco de la puerta. 



Ya chicas, eso fue todo por hoy ❤❤  y la dejo justito ahí, para ponerle un poco más de emoción a esta cosa. jajajjajaj con la foto de Johnny boy triste 

 No me convencía nunca el capítulo! lo tenía escrito, y le agregué hartas cosas para hacerlo mas vistoso, lo siento por lo pobre :( estoy intentando escribir narrador omnisciente ahora, por si encuentran algo raro, dicen uy la Alice se volvió loca! y ahora es vidente y sabe todo de todos, nono, solo soy yo con mis ocurrencias. 

Como se dieron cuenta, arriba dice "segunda parte: John Lennon" Lo que pasa es que partí la historia en dos partes, para organizarla mejor. Si ven el capítulo uno, dirá "Primera parte: Paul McCartney"  yo y mis ocurrencias, pero bueno... tal como el título lo dice, ahora las cosas cambiaran. Es mas que nada marcar el momento en que Alice y Paul dejan de existir, y comienzan John y Sadie. 

Nenas ahora cuéntenme de sus vidas Harrison santo, ¿Cómo les va?❤❤❤❤ yo aquí, disfrutando mis últimos días de vacaciones, para volver al colegio y todo ese rollo. CHICAS, ahora que tuve tiempo, empecé a usar algunas de estas redes sociales tan de moda que están, que aún soy como novata en todo sentido -que vergüenza-, pero igual, se las dejo por si alguna tiene, y me siguen, las sigo, nos seguimos... ya saben XD igualmente, me conocen, y saben que hablo tonterías siempre. Mi twitter: @CataMcLennon  WeHeartIt: cataintheskywithdiamonds ... igual dice CataMcLennon XD por cierto, ahí hay una carpeta con fotos que uso para el blog jajajaja :$ y un instagram, que no lo entiendo, pero igual XD @Catavargasp 

Y ahora que ya me trafiqué por internet, las dejo queridisimas❤❤  UN BESO A CADA UNA, ¡LAS ADORO! gracias por todo su love❤ ❤ y por leer esta historia, que ya toca la mitad... o bueno, casi... no me adelanto. 

 Este ya es el último del mes, faltan 6 días para mi cumple, así que subiré por allí por el primero de Agosto, con diseño nuevo y todas esas tonterías XD estoy chiflada :(


NOS VEMOS EN EL 27 WOW WOW WOW WOW WOW WOW WOW WOW WOW WOW! 


martes, 15 de julio de 2014

Capítulo 25 - *Nadie rompe mi corazón*

Hey everybody! ¿Cómo están todas? Terminé recién el capítulo, acabo de hornearlo, so, aún sigue tibio y echando humo (? jajajaja muchas gracias por leer ❤❤❤ espero les guste.


25




-Quiero empezar con un lo siento Amelie... se que ha sido una semana difícil, decisiones importantes, la película y eso... Y no he estado allí. Te traté pésimo, y lo siento mucho. 


Amelie me miró recelosa. Me acerqué a ella dos semanas después del incidente.   

-Bien- Dijo golpeando una taza de té sobre la mesa -acepto tu disculpa, pero Alice, solo como amiga, porque como colega ya no pegamos. Brian no quiere verte...- mencionó preocupada -Y sabes que ese hombre es difícil de persuadir. 

-No te estoy pidiendo trabajo Amelie, no te preocupes. Solo quiero disculparme contigo. 

Sonrió mas liviana, y asintió.

-Oui, disculpa aceptada.  


Caminé fuera de la oficina. Hace esas dos semanas que no veía a Paul también, y la verdad es que no quería encontrármelo por allí, aún no era algo que pudiese superar. 

No sacaba todas mis cosas aún de su departamento, pero la haría pronto, ya a que a Rachel al fin le crujió la idea de trasladar su carrera hasta aquí finalmente y arrendar un departamento en el nuevo Londres. Los padres de Rachel y Tony mandaron todas las cajas y muebles del departamento en un barco hasta Londres.

Así que fue una semana llena de trabajo para ambas, acomodando muebles, cajas, y otras cosas. 

-Que lindas se ven trabajando esclavas.

-Cállate Tony, y mueve el trasero.

-¿Me dejarán vivir aquí también?

-¿Por qué no? Si eres mi hermana Tony McFerrer.

-Juro que me pondré al día con mis estudios aquí- Dijo el chico, lanzándose en un sofá -Además ahora tengo a Harry, no necesito salir por allí a bailar. 

-Mis estudios... Pff, no te lo crees ni siquiera tú mismo- Inquirí riendo -hablando de otra cosa, mañana trataré de pedirle el trabajo de vuelta a Amelie, ya le pedí disculpas. 

-Yo te echaría volando a tu país, enserio, Americana malcriada- respondió el muchacho, mientras yo le saqué la lengua.

Colgué unos cuadros a la pared, y en ese momento, suena el timbre de portería. Que raro... No esperábamos a nadie.

-Hola, es el cartero- "¿El cartero?" Dudé.

-Que pase...

Rachel caminaba de arriba a abajo acomodando luces, mesas, entre otras cosas. Compró un televisor que estaban rematando en una importadora, seguramente era alemán, de última tecnología. Era muy grande y grueso, con detalles en madera. 

Me quedé viendo ese detalle, hasta que tocaron el timbre. 

-Hola... 

Mi corazón se fue al piso por un segundo al abrir esa puerta. Ahí estaba con un ramo de rosas rojas, fragantes como un plato de carne asada. ¿qué extraña comparación no?

-Hola... ¿Cómo sabías que estaba aquí?

-¿Cómo si no? pregunté en el hotel donde podía encontrarte, y el guardia sabía todo sobre tu amiga...- habló bajo, mientras Rachel se hacía pasar por sorda, pero lo cierto es que escuchaba todo lo que Paul decía, conozco a mi amiga como a nadie. 

-Rachel... claro, es que ella estuvo con ese chico un par de días y...- Sonrió al ver mis manos nerviosas -Eso, exactamente. 

Nos quedamos en silencio, en una de esas miradas infinitas e incomodas.

-Estás hermosa Alice. 

Dijo con sus ojos brillantes avellana. Sonreí sin ganas.

-Entra, por favor... ¿Un té, café?-

-No, no te preocupes, solo quiero hablar contigo...- Miró a Tony y a Rachel quienes estaban sentados en el sofá -A solas...- Sonreí.

-Claro... fuera de aquí esclavos- Los chicos se pararon de mala gana, y nos dejaron solos al fin. 

-Alice... son, estas son para ti- Me entregó el ramo de flores, el cual recibí por educación, si hubiese traído vino hablamos en otros términos - bueno, vine porque, necesito explicaciones. Ese día no logré entender nada... no entiendo aún por qué rompimos.

Suspiré. -Paul, simplemente ya no quiero, hace mucho que no era igual. Tú con tus viajes, y tus fans, y tus fiestas... no podemos estar juntos. Vas a ser papá McCartney, y te fuiste después que te enteraste, y sin ninguna explicación. Aún no sé si la engañaste conmigo, o si yo fui engañada, nada. Simplemente no McCartney.

-Escucha, nada de eso es así. Ella fue antes que nosotros, no te engañé con Anna...- lo interrumpí.

-¿Con quién entonces? fuiste a Australia no...-

Se quedó en silencio, mirando por la ventana. -Bueno, tú te acostaste con mi mejor amigo. 

-¿De qué estás hablando?

-Dos veces has salido de la habitación de John por las mañanas, ¿crees que soy estúpido? es obvio que se gustan...- Bajó un poco la voz, y suspiró  -Alice, cuídate de John por favor. Está bien, no fui muy buen hombre, lo acepto, pero sabes perfectamente lo que hice por ti, lo único que intenté fue hacerte sentir como una princesa. John no es un buen hombre, es buena persona claro, pero no juegues con él. Vas a sufrir Alice, John es un mentiroso, jamás fue fiel.- Eso aquel, se quedó estancado en mi cabeza como una espina. 

-¿Porqué te debería creer?

-Porque quiero lo mejor para ti, porque te amo Alice, me tienes malditamente enamorado.- Se lamentó -Y lo peor es que hice de todo para estar contigo, cielos... hasta tus amigos vinieron a Londres, pero veo que ya no puedo hacer nada más. 

Me sentí desgraciada. Pero cielos, no podía seguir dependiendo de él. 

-Paul, gracias, enserio, pero ya no- Se acercó a mi por última vez, y besó mis labios en una especie de impulso, el cual terminó en una bofetada justo en su mejilla.

-¡Tranquila, fue solo una broma!- Respondió luego con una sonrisa burlona, que detesté como nunca. -Siento que aún eres mía Alice, no me quitarás eso de la cabeza.


- ¡¿Una broma?!... eres un cerdo como todos los demás, no puedes hacer eso...  ¿Quieres saber la verdadera razón McCartney? bien, la tendrás. Mi padre fue un asqueroso que nos dejó a mi y a mi madre sin nada, cuando yo estaba grande para ver todo con mis ojos... hijo de puta. Mi madre sufrió tanto, cambió tanto, que se fue también, ahora vive en el cementerio- Solté una risa nerviosa entre llantos -Y no quiero, que otra persona tenga que vivir lo que yo vivo, la mierda que tengo que soportar todos los días. Preferiría olvidarme de todo, perder la memoria, pero no se puede. Así que aquí estoy, lanzando huevos a la vida, tratando de sonreír... ¿has visto mis huesos, mis uñas?- Me miró sin entender -McCartney, es tan obvio... jamás te percataste, no te tomaste el tiempo, eres tan egoísta que solo eres tú y tu mundo. Soy bulímica, a eso se debe el vomito de cada mañana, no estaba embarazada Paul. Tengo una maldita depresión, tomo pastillas todos los días...  No son anfetaminas porque sí, lo hago porque no tengo más. 

-Alice, eres una mujer hermosa...

-¿Lo ves? No entiendes nada- Me levanté y lanzé las flores al piso -Fuera de aquí. 

-Tranquila, no pasa nada...- Paul se estaba asustando.
-Quiero que estés con Anna, Paul. Quédate con tu hijo, no le des la oportunidad a la vida de golpearlo como a mi- Terminé secamente. 

Me miró como si algo no le crujiera aún, pensando el contra ataque.
-John romperá tu corazón...
-Nadie rompe mi corazón.
Y así, se fue Paul caminando hacia la puerta. Me resigné y caminé hacia adentro, pero decidí darme la última vuelta y ahí estaba el muchacho con cara molesta.

-Esto no se acabó aquí.


Me dejó pensando en mis asuntos, con el corazón en la mano. John, siempre John.


-0-




-Y ahora, en su estación preferida, los dejaremos con los chicos ingleses de hoy, ya han vendido millones, y nuestras auditoras no dejan de llamar, ¡THE BEATLES! Help!- Sonreímos entre todos, sentados frente a frente en esa mesa.

-¡Somos los jodidos reyes del mundo!- Celebró Ringo, que luego de dos semanas, Help! ya estaba en el número uno. Estábamos los tres menos Paul, en un restaurante, bebiendo champagne. 

John carraspeó, y imitó la voz grave -Quiero agradecer a mi perro, a mi gato, a mi sapo, al idiota que coordina, a la asistente de producción artística que está tan buena...- hizo un gesto obsceno con los ojos, todos reímos y comenzamos a gritar cosas. 

-¡Que Paul no te escuche!

-¡Alice es la mas sexy!

Carraspeó otra vez -A Amelie, que es bonita, pero no la seduzco porque es de mi Georgie- John sacudió de mi cabello. Todos me molestaron de vuelta, me sonrojé un poco y seguí riendo -A Brian, que lo odio, pero lo amo, que bueno que no está aquí, marica. A George Martin que hizo el trabajo... a mi, por ser el mejor John Lennon de The Beatles, no hay otro John mejor que yo...- Paul caminaba con una gafas negras, y una mujer que lo guiaba a la mesa, vestida con un típico traje y una toga -Y a Paul, que le falta un trago de esto... ¡Salud!- 

Todos bebimos.

- ¡Aaaagh!- Hice un gesto por el alcohol ardiendo en mi garganta- Hasta el fondo. Paulie, cariño, tómate un trago, la casa invita- Inquirí.

-No George, no tengo ganas.

-Que anciano te estás poniendo McCartney- Inquirió Ringo. 

-No es eso, eso solo que no tengo un buen día.

John le acercó una copa. -Es la mejor medicina- Paul le dirigió una mirada que en cualquier momento se convertía en golpes. 

-vete al diablo...- Susurró McCartney. 

-Hey vamos, ¿qué ese ánimo? Somos número uno Paul, por eso estamos aquí... ¡Somos jodidamente ricos!- inquirí,  John y Ringo alzaron sus copas felices.

-Salud por eso...- Bebió Richard. 

-¿Y por qué no vino Alice contigo?- Pregunté inocentemente. Noté que John sonreía extraño... Sí, al parecer metí las patas. 

Paul simplemente se levantó de la mesa, y se retiró. Ringo me desaprobó con la mirada.

-¿Qué? ¿Qué hice?- golpeó mi nuca -Auch. 

-0-



Paul se fué, y yo sonreía triunfal. -Que divertido, podría escucharlo por horas y horas. 

-Vamos, ya, díganme qué pasó... tú tienes cara de saber John...- Me sacó George de mis pensamientos. 

-No lo sé, pero sé que ella ya no vive con él, y que no lo quiere ver más- No disimulé el orgullo en mis palabras.

-George, Anna vino a su departamento, y le dijo que estaba embarazada...- Dijo Ringo especialmente al pequeño George, para que se pusiera un poco al día con lo que ocurría. Entonces este bufó.

-Pff, ya lo sabía, lo supe primero que todos, Alice me contó todo.

Terminó el almuerzo, y la busqué como loco, tenía que "saber que pasó". Maldición, solamente excusas. Necesitaba de ella, más que a cualquier otra droga que he probado estos últimos días. Sadie, mi sadie es más que cualquier cosa. 

 Así que terminé el trabajo, unas cuantas chicas sexy, pero desgraciadamente gritonas, unas entrevistas a un par de periódicos, y me escapé sin más, haciendo enojar a Brian como de costumbre. 

Y allí la encontré en un departamento viejo, gracias a unos cuantos trucos. 

Toqué el timbre.

-¿Hola?- Frente a mis ojos estaba Rachel, su amiga rubia que no recordaba  mucho, pero al verla supe todo lo que había ocurrido entre nosotros. Ella se vio impresionada, bueno quien no, aveces no recordaba quien era, y que salía treinta veces en la televisión al día. - ¡Pero qué rayos! ¿John Lennon?... ¿Cómo sabe...? 

-Hola Rachel- Sonreí triunfal -¿Me recuerdas?

-Sí... si, claro- Se puso nerviosa y entró, buscando algo, que al parecer no existía, porque lucía demente revolviendo un montón de cosas -Lo siento, pasa, me mude hace una semana, aún no está todo bien y...- La interrumpí.

-Estupendo- Seguí jugando con ella, y me senté en el sofá. -Así que, te mudaste... ¿Y? Alice...-

-Ella vive aquí, salió a comprar al almacén cosas para la cena-

-Tendrán que postergar sus planes de cena porque saldremos a comer a fuera- Inquirí sonriendo.

-¿Cómo, tendrán?

-Sí, los cuatro, con tu novio.

-No tengo novio.

-No hay problema, yo alcanzó para las dos- Le guiñé un ojo. La chica se sonrojó. 

Se escuchó el timbre que llama desde portería. -Lo siento, debe ser ella- Apretó un botón y abrió una puerta al parecer. Me brincaron los pies.

Me levanté más que rápido. -Voy a buscarla. 



-0-


Subí las escaleras, eran cuatro pisos, así que me hice el ánimo. Llevaba vegetales, pan, leche y huevos, algo se le ocurriría a Tony con esto... él cocinaba, yo era un desastre en persona en la cocina, nunca tuve cualidades, se me quemaban hasta los huevos revueltos.

Siento que alguien está atrás mio, pero volteo y no hay nadie. "De nuevo estas cosas de anfetaminas tienen efectos secundarios... voy a tener que ir a un doctor... no, mejor no ¿para qué? solo gastaré dinero, esos no hacen nada más que darte un par de pastillas, pero si me gustan las pastillas... estúpidos médicos"

-Buenas noches Sadie.

Pegué un salto y un grito y cayó toda la comida al suelo, rodaron tomates por las escaleras. 

-Hijo de... John.

El chico sonreía divertido. Estaba tan guapo como siempre, su cabello largo, una corbata colorida, una camisa celeste, y unas gafas cuadradas. 

¿Cuánto tiempo esperé para esto? tener esta confianza, esta conexión.

-¿Hijo de John? se llama Julian por si te interesa- No entendí nada -¿Cómo estás hermosa con olor a pies? vine por ti. -enarqué una ceja-  ¿Estás lista para cenar con el sexy de mi? De rara a sexy, de beatle a Alice, de John a Sadie...- lo interrumpí. 

-Ya, mucho, si entendí. Pues no, llevaba la cena aquí, y arruinaste todo, como siempre... imbécil.

Sonreí molesta, pero la verdad es que no puedo evitar ser coqueta con él, aunque sea un poco, para que se fije en mi... solo un poco, no pido mucho de su atención.

-Luv, no te preocupes, yo arreglo todos tus problemas, soy super John. 

-Bueeeeeno... super John, entonces recoge este desastre, tendrás que recompensar lo que hiciste.

-¿Acaso me viste cara de sirviente? Já- Lo miré molesta -Ya, está bien, si quieres te compro más tomates, no interesa.

Se agachó conmigo a recoger todos los vegetales y guardarlos en la malla que llevaba entre las manos. Entonces, extrañamente, y como en las películas más románticas y cursis de la historia de la humanidad, rozó mi mano, y nos quedamos allí, mirándonos, con todo el tiempo del mundo.

-Que raro...- Dijo de repente, sin dejar de soltar mi mirada.

-¿raro? qué cosa...- Pregunté nerviosa, y sonrojada. Odio como me hace sentir, si no es otra forma de decir que me encanta, para John todo funciona al revés.

-Eres la única persona rara que conozco Sadie, recuerda. 

Sonrió y echó la última manzana a la bolsa. Me sentí tan feliz, con el cielo en las manos, era su chica "rara".

Se acercó un poco más a mi, tomando mis manos, haciendo que dejara de lado la bolsa con vegetales, y se cayeran otra vez al suelo, reímos ante esto. Vi sus preciosos ojos achinados de cerca otra vez, era tan hermoso, tan sublime... sus ojos son profundos, hablan tantos idiomas que no puedo decifrar. Podía sentir su respiración sobre la mía, comenzó a acercarse a mi cada vez más y entonces... 

-Supe que terminaste con Macca... buena elección. 

Si hay amigas inoportunas, Rachel es la peor de todas. 




Ains D:  tienen permiso para golpearme, lanzarme comida podrida, chiflar y tirarme insultos :( jajajajaja y a Rachel, por su notable participación en este capítulo. La vida es cruel nenas, pero sigue y sigue, así que dice traer sorpresas❤ ❤  aquí también las trae señoras, ya verán. 

¡FELIZ INVIERANO! como dijo Lucy in the sky el otro día, porque algunas en verano, otras en invierno! pero... VACACIONES VACACIONES! -música de celebración- wow! fiesta everywere! jajajajja lo siento, ando un poquito feliz. Insisto, tienen golpearme  por ser tan imbécil. Hablando de invierno, aquí en donde vivo hay una pista de hielo... pero es ENANA, y es para toda la ciudad... hacen fila 4 horas para entrar pff... ni que fuese el concierto de los Artic Monkeys, no gracias. Quería comentarles mi molestia con el mundo   ajajajajjajaj 

El próximo capítulo será bien decisivo, comienza otro siglo en la historia, así que no se lo pierdan mis queridas ❤   y lo subiré antes, porque ya he escrito harto. 

UN BESO GIGANTE A TODAS, SE QUE ANDAN POR ALLÍ   y muchas gracias por sus comentarios en el capítulo anterior, Vickitorius, Danana, Lucy de Georgie, Querida Eleanor, y Lucy de Dylan. ❤   espero no les moleste a las Lucys que las puse con sus novios respectivos :O jajajaj   Y a Juanito que lee, siempre también, pero no comenta porque dice que es de chicas, pero le da el visto bueno antes de publicar jajajajaj GRACIAS   

 NOS VEMOS EN EL 26   ni yo me lo creo, tanto avanzó jajajaja BESOS   

pd: ¿Alguien me puede decir si este es George realmente? siempre he tenido esa duda XD buena selfie anyway jajajajaj